Abusos de menores
Hace mucho que el fútbol en nuestro país huele mal, muy mal. Hace años que dejó de ser tan solo un deporte o un sano entretenimiento popular. Hace tiempo que huele a mafias, a negociados, a barrabravas, a violencia, a negocios turbios, sórdidos. Y ahora, la gota que rebasa la Seguir leyendo







