· ¡Chicas! ¡Estoy re-podrida del calorón! ¿Cuándo termina el verano?

· El 21 de marzo, Patri, como siempre.

· Me extraña, araña. Vivís quejándote del frío todos los inviernos. No hay … clima que te venga bien, Gata Flora.

· Cierto. No lo niego. Soy socia vitalicia del “team verano”. Pero me estoy por cambiar de equipo. No aguanto más esta canícula. Derretida estoy.

· Eso te pasa por desarmar la pelopincho antes de tiempo. Los baños de asiento ayudan.

· Yo creo que elquetejedi, el de arriba, nos está hirviendo a fuego lento, para castigarnos.

· ¿Vos decís que se viene el fin del mundo?

· Es que el cambio climático no es casual, amigas. Lo provocamos los humanos, la especie más dañina del planeta. Nos esmeramos en destruir nuestra casa.

· ¡No te hagas la ecologista, Norma! Ni bolsa verde usás.

· Me hago cargo, y sé que está mal. Pero a veces me temo que todo lo que tiramos, lo orgánico, lo seco, lo húmedo, los restos de comida, plásticos, cartones, vidrio, todo va a parar al mismo lugar. ¿Me explico? Como que es un esfuerzo digno de mejor causa.

· ¡No, nena! ¡Con ese criterio, nadie hace nada! Cada una tiene que poner su granito de arena. Se empieza desde la casa a cuidar el planeta, de lo micro a lo macro.

· Okey, pero la deforestación no la ocasionamos nosotras. Ni los incendios intencionales de miles de hectáreas, con oscuros propósitos inmobiliarios. Hay peces gordos …

· Disculpen, chicas, pero peor es la basura de la telechatarra. ¿Vieron quién volvió a GH?

· Dejáme adivinar. ChantAlfa y su colección de bandanas.

· ¿Cómo sabías si jurás que no lo ves?

· Elemental, Watson. Se fueron los picantes y la casa quedó llena de larvas. Un embole. El charlatán bolacero ése los despertó del letargo.

· Pero entonces las puertas de esa casa son vaivén. Entran y salen “a piacere”. No vale.

· Todo vale por el rating, hasta matar a la madre en cámara. Todo.

· Mientras programas como ese bodrio midan tan pero tan alto, nos seguiremos mereciendo los peores gobiernos de la historia. Todo tiene que ver con todo. Cosechamos nuestra siembra. Nos auto destruimos con prisa y sin pausa.

· ¡Qué melodramática! ¡No es para tanto! El Presi pidió que no lo dejemos soñar solo.

· ¿Soñar? Yo más bien le diría que se despierte, que ya es hora, que está por terminar su mandato y nos dejó mucho peor de lo que estábamos. Más que sueño, una pesadilla.

· Hoy estás más negativa que de costumbre, amiga. La temperatura te re-calentó las neuronas. Bajá un cambio que te va a dar algo.

· Es que sueña con “cambiar el mundo” el chabón, y estamos sin luz, sin agua, con calles cortadas, sin ventiladores en las escuelas, con cero guita en el bolsillo … ¡No me jodan!

· Pero también tenés que admitir que toda la oposición es una bolsa de gatos, ¿no?

· ¡Sin duda! ¡De gatos rabiosos y sarnosos! Dan vergüenza. Todos peleándose por un kioskito. Patética toda la clase política argentina. Toda. Sin excepción.

· ¿No pensarás reflotar aquello de “que se vayan todos”?

· Mejor sería: ¿y si nos vamos todos, y los dejamos arrancándose las mechas, luchando en el barro?

· ¿Adónde nos vamos a ir? Si estamos más secas que lengua de loro.

· Justamente. A la de la lora. Nos caímos del mapa hace rato. Pasamos de ser “la Europa de América” al último orejón del tarro.

· ¿Te agarró la curda triste, Normi? ¡Sos un bajón! Vas a espichar por sobredosis de realidad. Prefiero anestesiarme con los realities truchos. Son más inofensivos. ¡Chin, chin!

Diario el Día de La Plata, 12/3/2023