«Dice que se termina, que es hora de que la entierren. Espero que no haya sido por esperarlos en vano… Cuando un espectáculo se despide, muere un personaje soñado una y otra vez, deseado una y otra vez, invocado y querido e iluminado por el alma de un ser vivo, que le presta sus sentidos a esa sombra fugaz para que sea, sombra fugaz que da nido y esperanza al teatro -la más verdadera de las vidas-, amparándolo de la infecunda realidad. Y da una enorme pena, porque se va una posibilidad más de saber por qué existimos, para qué existimos y cómo existimos desde «el otro punto de vista», el de la Creación Humana. Pero bueno: un velorio es la antesala de la tumba y, mi amiga Bianchi decidió que ese «algo que ya sabe» es suficiente. Quizás no, pero hay que confiar en su sabiduría. Igual la van a extrañar; así que ¡corriendo a verla!, porque una vez sellada, la caja no se abre. Y dentro de la caja queda la magia y la luz del actor para él sólo. De la actriz en este caso. ¡Feliz vuelo, personaje! ¡A vos, Irene, mi corazón, mi admiración y el deseo de que te arrepientas!»

¡Gracias, Miguel!

La cita es el viernes 28/10, 20 hs, en Teatro La Nonna (3 y 47), La Plata