AFTER OFFICE: Hay que pasar el invierno
¡Chicas, una buena! A no perder las esperanzas. ¡No me digas que nos van a dar la segunda dosis! ¡Por fin! ¡Me muero muerta, Gladys! ¡No es pa’tanto! Seguí esperando sentada. Hablo del corazón, no del brazo. ¿Te enamoraste? Yo no. La “One”. ¿Moria? Si estaba casada con Humberto Poidomani. Seguir leyendo