por Irene Bianchi
  • ¿Qué hacés con esa camiseta argentina puesta, ridícula? Ahora que vamos ganando, ¿te volviste mundialista “redepente”, como decía Niní Marshall?
  • María José tiene razón, Elenita. Sos un panqueque. Siempre despotricando contra Maradona, y ahora fanática de la Selección. ¡Qué oportunista, nena!
  • No soy la única. Sigo el camaleonismo generalizado. Además yo fui profe de Palermo en el Sagrado. Lo conocí de purrete al goleador.
  • Mejor que las minas no nos pongamos a dar cátedra sobre fútbol, porque resulta patético. La mayoría de nosotras somos advenedizas, pero nos hacemos las sabiondas para no quedar “off side”. Tocamos de oído.
  • Yo lo envidio a Messi, ¿qué quieren que les diga?
  • ¿Por qué, Nelly, si todavía  no metió ni un gol?
  • No, no es por eso. ¿No viste que dijo que tuvo a un griego encima los 90 minutos del partido? A mí nunca me pasó, ni con un griego ni con un autóctono.
  • Un filósofo, el marcador de Messi: Sócrates Papastahopoulos.
  • Menos mal que no se llamaba Sócrates Papanikolau, que si no, ¡pobre Pulga!
  • Hay unos cuantos jugadores nuestros que se parten de lindos: Higuain, Mascherano, Agüero, Demichelis…
  • Cierto, pero Demichelis tendría que aflojar un poco con la planchita, ¿no?
  • El papá del rubio dijo que su nuera, Evangelina, es una “picasesos”. Que lo llama a su hijo cada 5 minutos para vigilantearlo, y lo desconcentra.
  • Seguro que al suegro le dio asquito el chupón que le encajó en cámara la Alfano a la Anderson. Con la lengua le sacó crema de la punta de la nariz. Re-zarpada.
  • Últimamente, Gra no le hace asco a nada. ¿No la vieron manotearlo a Maxi Diorio en el programa de Tinelli, el nuevo Alberto Migré de la tele?
  • Hablando de escandaletes, ¿se enteraron que se casa Guido Süller?
  • Dejáme adivinar con quién. Flavio Mendoza, el coreógrafo fugitivo.
  • Frío, frío. Otra oportunidad.
  • ¿Alguien que tiene entornada la puerta del placard, y aún no se animó a salir?
  • No, con ése no. Guido se casa con un pariente.
  • ¿Con un pariente? ¡Qué incestuoso! ¡No se puede!
  • Bueno, una especie de pariente. Con su “hijito del corazón”, Tomasito.
  • ¿Cómo se va a casar con el hijo?
  • En realidad, dice que lo hace sólo para que el chico tenga la obra social de Aerolíneas Argentinas. Es una mezcla de unión civil y adopción. Otro beneficio  que va a ligar Tomasito son pasajes gratis a todas partes del mundo.
  • Haberlo sabido, me le ofrecía yo a Süller.
  • A mí me da pena el pobre Tito, que se le acabó el currito.
  • ¿Qué Tito? ¿El mariscal?
  • No. Un pecheto de Fort, que ganó protagonismo en Showmatch gracias a su cara de poker y a su mutismo. Al millonario le dio un ataque de celos y lo echó.
  • ¿Se dan cuenta? Para ser popular en los tiempos que corren, hay que pegar lengüetazos,  poner cara de piedra,  toquetearse en público, dejarse cortar la pollerita o el slip, armar bardo. Ingreso irrestricto a la fama. Vale todo.
  • Chicas, les propongo algo. ¿Vamos a casa a mirar el partido?
  • No, mejor quedémonos aquí, que hay pantalla gigante y olor a hombres.
  • Tenés razón. En una de ésas, en el revoleo, ligamos algo. ¡Chin, chin!