por Irene Bianchi
  • Chicas, ¿yo estoy senil o me perdí algo?
  • Ambos dos, Zulmita. Pero ¿por qué lo preguntás?
  • Porque la semana pasada muchos funcionarios le tiraron con munición gruesa al nuevo Papa, y unos días más tarde, se deshacen en halagos y por poco lo beatifican en vida. ¿Qué pasó?
  • Y, serán órdenes de arriba. Habrán cambiado la estrategia, vaya una a saber.
  • ¡Qué ciclotímicos que estamos! Cambiantes como el tiempo. Poco confiables.
  • Pasa en todos los ambientes. Fort se abuenó un rato y ahora volvió a las andadas. La Alfano pidió disculpas a diestra y siniestra, para luego prender el ventilador y escrachar a todos los tipos con los que se acostó. ¡Qué tupé!
  • ¡Tenés razón! Hasta dijo que tuvo algo con Palito, estando él casado. Un horror
  • Esa mina no tiene códigos ni vergüenza. No se le mueve un músculo de la cara.
  • Porque la tiene botoxeada, Gladys. No puede, pobre. Es casi porcelanato.
  • Imagínense a sus hijos, escuchando esas declaraciones, tan suelta de cuerpo, como si fuera un mérito haberse volteado tantos muñequitos. Pobrecitos.
  • Che, volviendo al “Papa made in Argentina”, ojo al piojo que Dilma se quedó atragantada con el resultado, y afirmó que Dios es brasuca.
  • ¿En serio? No pueden con su genio. No les gusta perder ni a la bolita.
  • Tenés razón, Cloti, pero ¿qué querés que te diga? Yo les envidio el nacionalismo que tienen, ese orgullo patriótico, ese sentimiento de país. Acá cada uno tira para su lado. No parecemos una nación, sino un montón de islitas.
  • Hablando de islitas, ¿qué opinan del pedido de nuestra Presidente a Francisco, para que interceda en el tema Malvinas?
  • A mi no me pareció oportuno. No era el momento. ¡Flor de bolonqui! Pesado.
  • Yo creo que Francisco, Pancho para nosotros, va a dar vuelta el Vaticano. Los tipos de Seguridad no saben cómo pararlo. Se les escapa, se acerca a la gente, hace travesuras, los saca de encuadre, se sale del libreto todo el tiempo.
  • No quiero ser malpensada ni agorera, pero más vale que elija a un cocinero de confianza, ¿no? Y que examine bien la yerba antes de cebarse unos amargos.
  • ¡Miren si pone de moda el mate en el Vaticano! ¿Se imaginan a todos los cardenales con el termo bajo el brazo, a lo charrúa?
  • Mujica no fue a la asunción, porque dice que es ateo.
  • ¿Qué tiene que ver? No todos los mandatarios que lo saludaron son creyentes.
  • Lo que pasa que el Pepe la juega de humilde, y Pancho le pisa el poncho.
  • Si vamos al caso, Obama tampoco fue. Mandó al vice. Estuvo flojo Barak.
  • ¿Y vieron qué golpe de efecto cuando llamó a la madrugada y les habló a todos los que hacían vigilia en Buenos Aires? ¡Un capo! ¡Está en todo!
  • Además no la va con la pompa ni el boato. Sigue usando sus viejos zapatos acordonados y atuendos simples. Sencillito, de alpargatas.
  • Y dio en la tecla, ¿no? Porque, lo que es a mí,  nunca me cayó bien tanto lujo y ostentación. No condicen con la misión y el mensaje de la Iglesia.
  • Obvio. No está bueno contar plata delante de los pobres. Es muy antipático.
  • ¿Vieron cómo se disparó el dólar? Se fue a la estratósfera, diría el patilludo.
  • ¡Con ése también estuvo la Alfano!
  • ¿Con quién no estuvo el riojano? En verso y todo.
  • ¡Por Francisco, para que contagie de humildad a nuestros dirigentes! Chin,chin