“Yo hago política para transformar la vida de la gente”, vociferaba Malena Galmarini entre sollozos. Quédese tranquila, Sra. Ya lo hizo el gobierno del que Ud y su marido forman parte. Ya transformaron la vida de los argentinos. Lo lograron con creces. Nos hicieron más pobres, más vulnerables, más ignorantes, más inseguros, más aislados del mundo, más dependientes de un Estado ineficiente, más subdesarrollados, más primitivos. Nos hicieron involucionar con prisa y sin pausa. Nos transformaron en escépticos, desconfiados, resignados, entregados. ¿O tal vez Ud llora por vergüenza, porque sabe-aunque no lo admita- que el kirchnerismo nos ha hundido en un pozo ciego sin fondo? ¿O quiere dar lástima, acaso? ¿Busca enternecernos? Esfuerzo digno de mejor causa, Sra. Mi abuela diría: “Lágrimas de cocodrilo”.

Diario Clarín, 28/09/2023