¡Obvio! Sobre todo, la “red carpet”. Mirá que me la iba a perder.
¿Me pareció a mí o todas las minas estaban en bolainas?
Casi. Nunca entendí el lukete veraniego en pleno invierno. ¿Acaso no se puede estar elegante y abrigada, che?
Parece que no. Hay que exhibir toda la mercadería. Aunque te congeles.
La Cirio se lo tomó en serio. ¿Vieron que se le escapó una lola en el escenario?
El pezón, querrás decir. Lo pecaminoso de la lola en esta cultura es el pezón.
Pero uno de los pibes Montaner apareció con el torso desnudo, y nadie dijo nada.
Hubo cada mamarracho. La griega Vicky vestida de alfajor marplatense de chocolate. ¿Habrá sido un canje? ¿Será su nuevo sponsor?
O tal vez tenía una fiesta de disfraces después, vaya una a saber.
A Sol Pérez le faltó tela. La panza al aire no la favorecía.
¿Panza? ¿Qué panza? Rechata la piba. Vos de envidia, por tu mondongo fofo, Chela.
¡Muy jugada la Maglietti! Transparencia abajo y arriba pechugas a la vista.
¿Viste la cantidad de premios que ligó “La 1-5/18”? Y vos que le bajaste tanto la caña.
Y se la seguiré bajando. Me pareció un bodrio. Menos mal que no premiaron al monocorde, monogestual de Esteban Lamothe. Actor de una nota sola, como la “samba” de Tom Jobim.
Dicen que los artistas son una “gran familia”, pero nadie le daba bola a los que subían a recibir el premio. Se oía el murmullo de la gente parloteando sin cesar.
Cierto. La Chiqui, con sus confesos 95, tuvo que poner orden y pedir silencio, como buena maestra ciruela.
¿Con “c” o con “s”, Lili?
Con “c”, obvio, como la fruta, bruta.
Te desasno, amiga. Ese dicho viene de Siruela, con “ese”, un municipio y localidad española de la provincia de Badajoz, en la comunidad autónoma de Extremadura. “Como maestro de Siruela, que no sabía leer ni escribir y puso escuela”. Es una burla a los sabelotodos que dan cátedra sobre temas que desconocen. Como nuestros beneméritos políticos.
¡Mirá vos! Siempre se aprende algo nuevo.
Merecido el premio a Juanita, la nieta de la Reina Madre. Acá entre nos, para mí es mejor conductora que actriz. Creció un montón en la cabecera de esa mesaza.
Se armó la podrida entre Ventura y Rial. Y eso que eran culo y calzón. Como Jorgito criticó el premio de APTRA, Luisito lo acusó de elegir a dedo a los ganadores de “Gran Hermano”, y de querer coimear al finadito Fort. Despechadísimos ambos.
Pesos pesados esos muchachos. Más vale tenerlos lejos.
“Bendita” merecía el oro. El único programa de chismes de la forrándula que me divierte.
A mí me torran los lacrimógenos y largueros discursos de agradecimiento, que por otra parte nadie escucha.
Dicen que lo más divertido fue la festichola post-ceremonia. Un descontrol. Todos chuponeándose con todos. Mucho chupi y chape.
¿Se habrán sacado los stiletto? No sé cómo aguantan semejantes tacos las minas.
Vos porque vivís en pantuflas, Chela. Te dura el síndrome pandémico.
Te juro que se me ensancharon las patas. Dos empanadas, parafraseando a Brandoni.
Bueno, brindemos por “el sol del veinticinco”, chicas, “que viene asomando”. ¡Chin, chin!