por Irene Bianchi
No resulta fácil describir con palabras el festín de imágenes que ofrece “Corteo”, el espectáculo de la compañía canadiense “Cirque du Soleil”, que T4f (Time for fun) presenta en las carpas levantadas en Complejo al Río, Vicente López, hasta el 3 de agosto.
 El vocablo italiano “corteo” significa “cortejo”, y se refiere al funeral que imagina un payaso -“Mauro”- mientras sueña qué ocurrirá tras su muerte, un sueño del que ni él ni nadie querría despertarse. La tristeza brilla por su ausencia en este cortejo tan carnavalesco, que celebra la alegría, el amor, la amistad. Un canto a la vida.
El espectador de este bellísimo espectáculo se asombra, ríe a carcajadas, se conmueve hasta las lágrimas, se sobresalta, estalla de emoción, convirtiéndose en protagonista de un mundo onírico, de una fantasía fellinesca, poblada de seres etéreos, de ángeles de la guarda, de arlequines, a quienes se suman los típicos artistas circenses de todos los tiempos.
Hay una riquísima teatralidad en “Corteo”, además de la impecable destreza de acróbatas, trapecistas, malabaristas, equilibristas, bailarines. Nada menos que 60 artistas de 19 países diferentes, dan vida a estas criaturas escapadas de un libro de cuentos, que nos retrotraen e nuestra infancia, cuando descubríamos la magia imperecedera del circo, al que “Corteo” rinde un exquisito homenaje.
¿Qué decir del suntuoso vestuario, del maquillaje, de la puesta de luces, de la música, de los cantantes, de las escenografías que los propios intérpretes van armando y desarmando, como buena troupe circense que se precie de tal? No hay nada librado al azar. Todo cuidado hasta el más mínimo detalle. “Corteo” funciona como un delicado y preciso mecanismo de relojería, y habla a las claras de un rigurosísimo entrenamiento en pos de la perfección, sin perder nunca el espíritu espontáneo y festivo.
Resulta oportuno destacar que el amigo, casi hermano, de Mauro, el payaso que sueña, es el gigante personificado por el actor argentino Victorino Luján, tan enorme como tierno.
 La Jefa de Prensa de la compañía, la japonesa Mami Ohki, nos cuenta tras la función, que Corteo se estrenó en 2005, tras 2 años de preparación. Fue dirigido por el suizo Daniele Finzi Pasca, quien le dio a este espectáculo una fuerza teatral que no tienen los otros shows de la compañía fundada por Guy Laliberté, en Québec en 1984. Actualmente cuentan con 8 espectáculos en gira y 12 permanentes, repartidos por todo el mundo. Tras desarmar su carpa en Buenos Aires, parten rumbo a Chile, donde desembarcarán por vez primera.
“Corteo” es un espectáculo verdaderamente imperdible para grandes y chicos. Queda un recuerdo imborrable tras disfrutar de este banquete de creatividad, talento. Un estallido de color.  Un derroche de Arte, en el sentido más amplio de la palabra.