por Irene Bianchi
  • ¿Y, chicas? Supongo que ya están preparadas, ¿no?
  • ¿Para las Fiestas? ¡En absoluto! Ni siquiera sé dónde las voy a pasar. Ni con quién. Para colmo, la mitad de mis parientes son ultra K y la otra mitad, re-contreras. Más vale que no nos pongamos a hablar de política, porque terminamos a los tortazos y a los sidrazas limpios.
  • No hablaba de las Fiestas, Nilda, sino de otra cosa.
  • ¿Preparadas para ir la playa, decís? ¡Ni ahí¡Tengo unos flotadores inmostrables, el cuerpo más poceado que el camino a Magdalena, y un blanco teta cadavérico. Voy a poner de moda el traje de neoprene esta temporada.
  • Tampoco estaba pensando en el veraneo, chicas. Se viene el 21D.
  • ¿El 21D? Ese es nuevo. ¿Tiene algo que ver con la Ley de Medios?
  • No.  Al medio nos van a partir. ¿No se enteraron de la fin del mundo? No se sabe bien si es el 12/12/12 ó el 21/12/12. Una de dos.
  • Sí, Nelly. Yo ya compré azúcar, arroz, porotos, fideos, polenta, yerba, agua mineral, papel higiénico, jabón blancofósforos, curitas, quitaesmalte
  • ¡Pará, fanática! ¿Te volviste loca?
  • Soy previsora. Mi nona, mi vieja y mis tías siempre llenaban la alacena y el botiquín cuando había rumores de revolución. Estoy bien entrenada.
  • Pero esto es distinto, ¿no entendés? Si se acaba el mundo, ¿de qué te va a servir  toda esa mercadería?
  • ¿Y qué sé yo? En una de ésas nos vienen a rescatar unomarcianitos guapetones en sus platos voladores, les hacemos dedo, y nosotras colaboramos con el morfi. Una especie de canje por los viáticos,¿entendés?
  • Mejor no hablemos de canje, que estamos en el horno.
  • Yo estaba pensando, si esa profecía se cumple, ni vale la pena que empiece la dieta. ¿Saben qué? Si se acaba el mundo, voy a lastrar a morir. Prefiero reventar antes por mis propios medios. De ahora en más, kilos de helado, dulce de leche y crema pastelera a cucharadas, fritangas, choripanes, bizcochitos de grasa, bolas de fraile, churros rellenos, chocolate, pan dulce frutado
  • ¡Pará, zarpada¿Y si no pasa nada? ¿Si es falsa alarma? ¡Y vos hecha un lechón adobado! ¿Quién te aguanta?
  • ¡Ufa! ¡Me pinchaste el globo! Yo quería tener piedra libre para portarme requetemal. Aprovechar para hacer todas las tropelías que no me animé hasta ahora. Qué sé yo: encajarle un chupón al portero, revolear el corpiñotomar sol desnuda en la plaza, hacer ring-raje, arrojar escupitajos desde el balcón, gritarle frígida a mi vecina, agarrarme una curda terminal, tirarme cuescos sonorosen mi clase de yoga, teñirme de rojo furioso, arrancarle una por una las extensiones a la actual de mi ex, hacer bungee jumping sin miedo a estrolarme, rayarle el descapotable a mi jefe, robar golosinas de un kiosco
  • ¿Y por qué esperar el Apocalipsis para sacarte todas esas ganas, Elda?
  • Soy loca pero no como vidrio. Perdido por perdido, te confieso que tiro la chancleta. Pelito al cielo. Pero si existe algún margen de duda, prefiero seguir guardando las apariencias y silenciar mis demonios interiores.
  • ¿Se acuerdan de aquel dicho popular? ¡ aparearse, que se acaba el mundo!
  • Esa es otra buena opción, Nilda. Pero los tipos van a estar tan julepeados que dudo que estén a la altura de las circunstancias. Un bajón.
  • Ojalá lo de los Mayas haya sido sólo una jodita para Tinelli. ¡Chin, chin!