• Seré curiosa, Sarita. ¿Quién era el pendejo que te trajo en auto? ¿Algún festejante?
  • ¡No seas ridícula! Es Fede, mi sobrino nieto. ¿Cómo se te ocurre?!
  • ¿Y qué tendría de malo? Acaso la Saccone no se enganchó uno 25 años más joven.
  • Cierto. Y lo peor es que es el hijo.
  • ¡No, nena! Hizo de su hijo en una obra de teatro. No te confundas.
  • Lógico, si en esa obra el protagonista se enamoraba de una cabra, no resulta extraño que la Saccone se enamore de su hijo. Toda gente rara estos artistas.
  • ¿Y no se acuerdan de Demi Moore, y su fogoso romance con el bomboncito Ashton Kutcher?
  • Así quedó la pobre Demi cuando el pibe la cambió por una de su edad. Hecha un trapo de piso. Flaca, fané y descangayada.
  • Sí, pero ¿quién le quita lo bailado? Fue bueno mientras duró.
  • A estas caza pendex se las llama “cougars”. Viene del argot inglés. Hablando de Roma: ¡miren qué fuerte que está el mozo! ¿Cuántos añitos tendrá?Ñamñam
  • En mi época se decía poliomielitis, porque atacaba a los infantes.
  • ¿Y a los tipos, cómo se les dice? ¿Viejos verdes?
  • La que se llevó un chasco fue la Calabró. Le salió el tiro por la culata.
  • ¿Cuál de ellas? ¿La panelista de lolas en bandeja?
  • No, la hermana, la ex del Rossi. La que se chuponeó a Maravilla.
  • ¡Un grosero! ¡Salió a decir que Iliana tiene más años que la escarapela!
  • Y ella no se quedó atrás: “Lo que le pasa es que está buscando a un hombre de su edad”. No se sabe muy bien para qué equipo juega Sergio Martinez, ¿vieron?
  • No te metas con la edad de una diva, porque es peor que un escorpión.
  • Un desubicado el boxeador. Se comió un buen cross a la mandíbula por bocón.
  • Knockout técnico. La Calabró lo dejó tirado en la lona. Pa’que aprenda.
  • ¡Ay, chicas! ¡Era tan obvio que ese chupón le daba asquito! Lo malo es que Iliana se ilusionó. Como fue mujer de un solo hombre y hace rato que no le ve la cara a Dios, se entusiasmó con la musculatura de Maravilla. Se hizo el bocho.
  • ¡Blasfema! No lo metas a Dios en todo esto, que bastante ocupado debe estar tratando de arreglar el zafarrancho que hacemos los humanos.
  • Che, hablando de calenturas varias, ¿ustedes también están calenchus con el pelado de “Las Mil y una Noches”?
  • ¡Ni ahí! ¡Además es re-mamero! ¡La vieja lo tiene cortito! Le digita las novias.
  • Está bastante sobrevaluado ese culebrón.
  • Lo que pasa que los locales agotan. Arana siempre haciendo de Arana, satura.
  • Faltan guionistas. En cambio, la realidad parece un policial negro al mejor estilo Edgar Allan Poe, Raymond Chandler o Roald Dahl. ¡Qué bolonqui!
  • Pensar que antes  en los eneros no pasaba naranja. Calma chicha.
  • Calma chicha hay en las boleterías de la mayoría de los teatros. Salvo un puñadito de obras, el resto hace la plancha a gatas.
  • Gatas sobran. Y re-gatas salvajes, ni te cuento. Lo que faltan son actrices.    
  • ¿Ustedes pueden creer que la entrada para ver “Extravaganza” sea tan o más cara que la del Cirque du Soleil? ¿No se le fue la mano al platinado zezeozo?
  • Se les fue la mano. El grueso de la gente veranea más cortito y más gasolero.
  • Che, juntemos una buena propina, a ver si nos levantamos al mozo. ¡Chin, chin!