¿Vieron, chicas? Ya empezó la guerra de las boleterías. Que quién va primero a nivel local, a nivel nacional, que quién está asociado a AADET, quién no. Siempre el mismo bolonqui, y cada vez más temprano en la temporada. No tienen paz los teatreros.
El que es más pícaro que bonito es Artaza. Bajó el precio de las entradas para llenar la sala. Más que “Pato a la Naranja”, su comedia podría llamarse “Pato Barato”.
¡Lo bien que hace! Los demás se fueron de mambo. Al turista gasolero de hoy en día a gatas le alcanza para morfar y dormir bajo techo.
A mí me encantan los escandaletes que fabrican para promocionar sus espectáculos.
Ay, contáme, que hace mucho que no consumo chismes, porque me tiño en casa.
Iúdica está agrandado como alpargata en el agua porque “Mansión Imposible” la está rompiendo, y ninguneó a los cómicos cordobeses, que se ofendieron a morir.
¿Y desde cuándo “Iúdica moco fácil” es actor, si se puede saber?
Ahora que decís, el marido de Flor de la V lo patoteó a Gianola por sus dichos. “Se comió los mocos”, dijo el odontólogo.
¡Que asco! ¿En serio se los comió? De postre habrá sido, porque salía del restorán.
No, nena. Es una metáfora. Quiso decir que arrugó, que se fue al mazo. Reculó.
Igual no creo que ningún gil pague 2 gambas, si puede ver todo esto gratis en la tele.
Otra: Flavio Mendoza le prestó su auto de alta gama a su noviecito, y el tipo se levantó una mina. ¿Pueden creerlo? Parece que resultó binorma el chaboncito.
Ya no se puede confiar en nadie, che. Pobre platinado.
Lejos lo peor de la semana fue la foto que circuló de Cristian Castro en hilo dental.
Digo yo, ¿qué espera ese muchacho para abrir la puerta del placard? ¿No se enteró que está todo bien, que nadie lo va a señalar con el dedo?
No te olvides que tiene una relación edípica con su mamá, el corchito erótico.
¿Y qué me cuentan del reality de las estrellas, conducido por Moñito Polino?
¿Estrellas? Más devaluadas que el peso. Ya lo veo a Federico Bal armando prolijamente un porro en el Canal de la Familia. Un Utilísima de drogas blandas.
¿Vieron que Wanda ya lo engrampó a Icardi con un bepi?
¿Qué vulgar que sos, Coca! ¿Cómo podés hablar así?
¡Ay, bueno! ¡Disculpáme! Quise decir que está en la dulce espera por cuarta vez.
Estas chicas nunca un plomero o un electricista, ¿no?
¿Electricista? ¡Firmo ya! Con los cortes que se vienen, cotizan en bolsa.
¿Se enteraron que el gobierno va a gastar 4 palitos para que a la Casa Rosada nunca le falte luz? Pavada de grupo electrógeno.
Hace rato que muchos funcionarios están a oscuras. En la “capoccia” digo.
Esta semana, Kici y Coqui parecían los Pimpinela, por cómo se trenzaron.
Es que se ha puesto tan de modo el stand-up y la improvisación últimamente, que deben estar armando una presentación para el Complejo La Plaza. “El Dúo Katraska.”
¿Y qué me cuentan del dólar, que se fue a las nubes? Casi 11 mangos. ¿Y la fruta?!
Es la famosa “sensaflón”, amigas. Sensación de inflación. Qué v’hacer. Ajo y agua.
Yo creo que le están dando a la maquinita como Salamanca al piano. Valen más mis viejos y ajados billetes pintados de “El Estanciero” que los pesos moneda nacional.
Yo estoy viva de milagro, chicas. Estuve a punto de morir sepultada bajo el techo del Ministerio de Salud. Zafé por un pelito.
Te hubiéramos ido a llevar una corona a la casa de sepelios de la vuelta, Coca.
¡Che! ¡Tocáte la izquierda! ¡No seas mufa!
Que a la Casa Rosada se le corte la luz, y el Ministerio de Salud se derrumbe, es una metáfora de un íspa hecho pelota por donde se lo mire.
¿Pelota? Justamente la pelota nos va a distraer un buen rato. Pan y circo. Chin, chin!