por Irene Bianchi
  • ¡Chicas, casamiento en puerta! ¡A preparar las pilchas!
  • ¡Me estás jodiendo! Vos no escarmentás más. ¿Quién es la víctima, Lili?
  • ¿Estás loca? ¡Tocáte la izquierda! ¡Yo no! El que se casa es Oyarbide.
  • ¿Posta, Lili? Bueno, flor de anillo ya tiene. ¿De blanco se casará?
  • Con Blanco. Claudio Blanco. Un entrerriano. Está previsto para abril o mayo.
  • El musicalizador podría poner “Para abril o para mayo”, de Rosamel Araya.
  • ¿Y a qué no saben quién es la “wedding planner”? ¡Su amiga Flor de la V!
  • ¡Ah, bueno! Estamos todos. Pongan los fideos. Cartón lleno.
  • Qué casualidad que siempre le caen las causas espinosas a ese juez, ¿no?
  • Con respecto a esas sospechas, él le dijo a los periodistas que tendrían que preguntarle a Dios por qué le tocan.
  • No es mala idea. Si el Papa tiene twitter, es probable que su Jefe también.
  • ¡Uy! Yo tendría tantas cosas que preguntarle al Tata Dios vía twitter.
  • ¿Si perdona tus pecados, Silvi?¿Si está por reventar el planeta?
  • El planeta, no sé. Nosotros, seguro. Mirá todo lo que pasó esta semana en Buenos Aires. Los porteños, tapados de basura, intoxicados y sin subtes. Dos aviones que casi chocan en el aire en Ezeiza. Una película de terror.
  • Che, ¿vieron que en “Graduados” finalmente nació el hijo de la Mujer Alambre y John Bon Jovi? Todavía no saben cómo llamarlo, pobrecito.
  • Más vale que se apuren, porque si no, capaz que la diputada “K” Pan Rivas le pone Néstor Carlos, como sugirió que llamen a todas las escuelas de la provincia de Buenos Aires que no tienen nombre.
  • Eso no tiene nombre. ¡Cuánto fanatismo! Los acólitos son más papistas que el Papa. Se matan por hacer letra gótica con Cristina, como alumnitos chupamedias que le llevan una manzana lustrosa a la señorita.
  • Hablando de alumnitos, ¿qué me cuentan de lo que pasó en el Nacional Buenos Aires? Dejaron libres a 70 chicos de 5º por la famosa “vuelta olímpica”, pobres
  • ¿Por qué “pobres”? Sabían muy bien que no estaban autorizados. Infringieron una norma y fueron sancionados. Así de simple.
  • ¡Pero son adolescentes, Normi! ¿No te parece que se les fue la mano a las autoridades con semejante castigo? ¿Nunca fuiste chica vos?
  • ¿Ves? Ese es uno de nuestros peores defectos. No respetamos las normas y no nos bancamos la sanción. La función de la escuela no sólo es trasmitir conocimientos, sino formar ciudadanos responsables y respetuosos. Si no, ¿para qué existen las leyes?
  • Últimamente, con las idas y vueltas de los jueces, que juegan a las esquinitas, no sabría responderte esa pregunta, Silvi.
  • ¿Y por qué están todos tan enloquecidos con la Ley de Medios?
  • Porque hay intereses y negociados que nosotras desconocemos. Sólo vemos la puntita del iceberg.
  • Mientras no nos estrolemos, como el Titanic.
  • ¿Fue Maquiavelo el que dijo que el fin justifica los medios? Bueno, pareciera que esta Ley de Medios justifica ciertos fines.
  • Non-sanctos, agregaría yo.
  • ¿No será que los que ganan la pulseada, se quedan con el jamón del medio?
  • Me dieron ganas. ¡Mozo! ¡Un “medio y medio” para todas! ¡Chin, chin!