¿A ustedes no les pasa que les da cosita llamar a alguien que hace mucho que no ven, para saludar por su cumple, por ejemplo?
¿Miedo? No entiendo.
Digo, porque han habido tantas bajas últimamente y por ahí metés la pata.
¡Ah! ¿Vos decís si el sujeto en cuestión ya se mudó a la Quinta del Ñato y vos ni enterada?
Eso. Justamente.
¡Ay! ¡Tocáte la izquierda, che!
Gladys tiene razón, Irma. Yo cada tanto paso lista y llamo para comentar cualquier boludez.
¿Cómo se les ocurre?
Escucháme, entre el fucking bicho y sus múltiples variantes, el estrés cotidiano, la mishiadura, los corte de luz, la canícula, el país empantanado, el diluvio, hasta el más pintado crepa, amiga.
¿Será el Apocalipsis?
Ojo que Violeta Lo Re dijo que es femenina.
¿Quién?
La que fue novia de Ricardo Fort. ¿No se acuerdan qué le dijo a Rial?
Yo sí. “La apocalipsis existe y empieza ahora”, dijo.
¡Qué visionaria! Una pitonisa la mina.
¡Violeta Lo Re! ¡Cuántas mediáticas fugaces pasaron por la cajaboba!
Grandes pases en la tele, ¿vieron! Muchas figuras cambian de camiseta. El dúo Pallares-Lussich, Jey Mamon, Novaresio, Angelito, Flor Peña …
Hablando de Flor, ¿qué quiso decir cuando entre sollozos largó: “Mi actriz me llama. Mi actriz me pide”?
Ni idea. Pero cuando hablan de si mismas en tercera persona, agarráte Catalina. Se caen del ego y se estrolan.
¡Qué bolonqui se armó con la propuesta de Pachano en Carlos Paz!
¿Por?
Decidió hacer teatro “a la galera”, o sea, a la gorra. El público ve el espectáculo y pone lo que se le canta.
¿Y por qué bolonqui?
Porque las otras compañías dicen que es “competencia desleal”.
No me parece. Yo lo aplaudo. Excelente estrategia de marketing. Muy adecuada a la malaria y a los bolsillos flacos. Cada cual se vende como puede.
Difícil esta temporada. Se te embicha uno del elenco o un técnico, y tenés que levantar campamento.
Y sí. El lema es “Sólo por Hoy”, como el de AA.
Si algo enseñó el Covid, es que nadie tiene la vaca atada. A seguro se lo llevaron preso.
No sólo eso. También que estamos todos hiper conectados. Cuando no había aviones, las pestes se quedaban circunscriptas a un lugar. Ahora se desparraman como si nada.
¡Claro! El famoso “efecto mariposa” o “teoría del caos”.
Ahí ya me perdí, amiga. No me la compliques, please.
Yo prefiero una mariposa al Rockefeller Center, como canta el Nano.
Obvio. Al precio del dólar, olvidáte de la Gran Manzana. ¡Chin, chin!