¡Ay, chicas! ¡Qué bochorno lo que pasó después de las legislativas porteñas!
¡Ni idea, Cata! No les di bola. ¿Qué pasó? ¿Hubo fraude?
No sé. Lo seguro es que hubo borocotización masiva “ipso pucho”.
Y eso ¿qué es?
¿No te acordás cuando Eduardo Lorenzo Borocotó se pasó de buenas a primeras del macrismo al kirchnerismo. Saltó con garrocha de un espacio al otro sin mosquear.
¡Qué traidor el Doc!
Digamos que dio el puntapié inicial de una tendencia que ahora es habitual. También lo llaman “transfuguismo político”, cambio de casaca o cambio de bloque.
¿Y ahora quiénes se cambiaron de camiseta, si se puede saber?
El colo Santilli, (ex de la polémica Nancy Pazos), que viene del PRO, ahora coquetea con Peluca, el ganador.
¿Cómo?! ¿No ganó el pelado Rodríguez Larreta? ¡Si lo vi sonriendo de oreja a oreja!
¡No! Estaba fingiendo demencia. Se hizo el que no le importaba, y se fue a llorar al baño.
¿Y el Gato Macri?
Cola de perro. Pero como es rico, se tomó un avión al día siguiente y se rajó a España.
¿Y la gente de Lilita?
La Oliveto, perdió su banca.
La culpa es de la Carrió. Porque anda por todos los canales, haciéndose la estandapera sexy, confesándole su amor a Gustavo Carabajal, y promocionando su línea de ropa. Papelón tras papelón.
¿Y Marra, el de los ojitos azules desencajados?
Otro que quedó en la lona.
¿Y las encuestas acertaron?
No. Fallaron, como siempre.
¿Es cierto que fue a votar poco más de la mitad del padrón solamente?
Y, sí. Porque la gente ya no les cree a los políticos. Estamos hartos de que nos estafen y mientan en la jeta. Dicen que hay sol y salimos con piloto, paraguas y galochas, por las dudas.
¡Ni la Chiqui fue a votar! Ella que nunca falta. Una Sarmienta la Legrand.
Pensar que hace unos días, el 22 de mayo, se cumplieron 215 años de aquella famosa frase de boca de los habitantes del Virreynato: “El pueblo quiere saber de qué se trata”.
Hoy el pueblo no quiere saber nada de nada. Todo lo que digan los políticos es bolazo.
¿Y quiénes más se anotaron en “el libro de pases”?
La Pato abandonó al Gato, y arrastró a 5 diputados con ella. Parecen los Pimpi peleándose.
Así como Julio Grondona tenía un anillo que decía “Todo Pasa”, creo que el Javi tiene otro con la frase de Julio César: “Divide e impera”. Está rompiendo todo.
O la de Napoleón Bonaparte: “Cuando el enemigo se equivoca, no lo distraigas”.
¿Y el del vozarrón, Ritondo? ¿También se borocotizó?
Otro que negocia una alianza con la “Big Sister”, la que manda.
O sea que pasaron del amarillo al violeta en un santiamén.
Se meten los cuernos desembozadamente. Son más infieles que Mauro, Wanda, China y la mar en coche.
Miren que el Gato reculó en chancletas, se tomó su tiempo, y finalmente felicitó al Presi. Parece que quiere bajar la tensión. O asegurarse un casillero.
¿Y por casa, cómo andamos? No veo la hora de que empiecen a tirarse de las mechas los que tienen la sartén por el mango en esta provincia que hace agua por todos los wines.
Chicas, brindemos con chicha y aguardiente, como en mayo de 1810.
¡Y viva la Patria, a pesar de su patética dirigencia! ¡Chin, chin!