
· ¡Fresias para todas! ¡Feliz primavera, chicas!
· ¡Gracias, amiga! ¡Amo este aroma! ¡Me pone de buen humor! ¡Renazco!
· ¿Se acuerdan de los picnics de la primavera de nuestra adolescencia?
· ¿Cómo olvidarlos? Los primeros noviecitos, los primeros besos, las revolcaditas en el pasto
· Fue hermoso vivir sin pantallas, sin celulares, sin internet, sin redes sociales, mirándonos a los ojos, charlando y haciendo fiaca durante horas, escribiendo cartas de amor, esperando la llegada del cartero …
· ¡Ufa! ¡Estás a punto de decir que todo tiempo pasado fue mejor, Elsi! ¡Te conozco!
· Todo tiempo, no, pero el nuestro seguro que sí. ¡Esos “malones”!
· ¿Malones? Para mí eran “asaltos”. Los chicos: la bebida, las chicas: la comida.
· Y hacíamos un alto obligado para mirar “El Club del Clan”.
· ¿Se acuerdan qué nos poníamos? Minifaldas con botas altas, hot pants, jeans pata de elefante, mangas abullonadas …
· Y después vinieron las maxis, la moda Courrèges, las túnicas batik, el hipismo, el Flower Power …
· El pelo batido, con mucho spray; dormíamos con redecilla para que durara; la famosa “toca” para alisar los rulos y las odiadas ondas …
· Los corpiñitos Virtus armados, para las “tabula rasa” como yo …
· ¡Y la música! ¡Esos lentos para chapar! Tendríamos que juntar firmas para que vuelvan, ¿no?
· Dale. El detalle es que ya no tenemos con quién chapar, Elsi. Una pena.
· Ahora se dice “apretar”, creo. O “transar”.
· ¡Ni eso! Van directo a los bifes. Sin pre-calentamiento.
· Disculpen, chicas, pero más que nostalgia, huelo cierta envidia. ¿No es más fácil ahora?
· Sí, pero lo fácil dura poco. Lo que cuesta y tarda vale más.
· Decís eso porque somos de la generación que valoraba el esfuerzo, el sacrificio, la paciencia, el mérito; días de padres y maestros estrictos, de un toque de queda para volver a casa, de ganarse cosas a cambio de buenas notas, de la terapia del chancletazo
· Altri tempi, ragazze …
· Tiempos analógicos, diría yo, a años luz de estos digitales.
· Nosotras qué somos: ¿millennials?, ¿centennials?
· ¡Ni por asomo! Somos “Baby Boomers”, nacidas después de la Segunda Guerra Mundial. La que sigue es la “Generación X”. Y la actual se llama “Alfa”: youtubers, tiktokeros, influencers.
· Lo bueno es que pasamos por todo eso, transitamos dos siglos, y seguimos vivitas y coleando. Una capacidad de adaptación milagrosa. Resilientes al mango. ¿Quién nos pisa el poncho?!
· Honestamente, yo no cambiaría mi infancia de vereda, bici, rayuela y potrero por la de mis nietos adictos al celu.
· Ni los “asaltos” de aquellos años, por los de ahora a punta de pistola o arma blanca.
· Las vecinas sentadas en la vereda chismorreando, eran las cámaras de seguridad del barrio, ¿se acuerdan?
· ¡Che! ¿Les agarró el viejazo o qué? Están super retro hoy. Me hartaron. ¡Son un bajonazo!
· Perdón Susy, tenés razón, pero la fecha lo amerita. No es un día cualquiera.
· Y como no es un día cualquiera, brindemos con un cóctel Primavera. En verso. ¡Chin, chin!
Diario El Día de La Plata, 21/9/2025