Gran desilusión nos llevamos con «Pablo Escobar: La Traición» porque era interesante su premisa. Escobar desde la mirada de su amante. De su perra porque «era una perra de escobar que sabía todos sus negocios sucios, todos sus muertos y ella gozaba de la plata sin importarle». ¿De quién es esta frase maravillosa? De mi suegra que es Colombiana ( toda mi familia política lo es) quien me instruyo un poco sobre quién era esta mujer  («periodista de radio, mucha radio» me dijeron) y fue la que ayudó a don Pablo a meterse en la política ( su gran error, sino capaz hubiese podido seguir matando y envenenando el mundo con la droga).
 Era promisorio ver la figura del capo de la droga desde la sensibilidad de una mujer, pero todo quedó en nada porque esta peli muestra LO MISMO, de la MISMA manera ( salvo que acortado en dos horas) que se vio en la gran serie «Narcos» o la novela «El Patrón del Mal».
 No hay nada nuevo, ni nada que no hayamos visto salvo que con algunas decisiones con muy mal gusto.
 A ver ¿por qué un pueblo latinoamericano habla en ingles entre ellos, me explicás? ¿Porque se quieren hacer los surrealistas con el idioma? Sólo en un realismo mágico los colombianos pueden decir «dame una bandeja paisa» en Inglés ( que cuando vayan a Colombia es un plato de comida que no pueden perderse). Esa ESTÚPIDA decisión te saca del entorno, te aleja, te descontextualiza y hasta te causa gracia básicamente porque su protagonista, la bella Penelope Cruz, tiene un desdoble en su actuación. Es buena cuando usa su lengua materna y es lo peor que le pasó al mundo de la actuación cuando actúa en inglés ( si, acá están las dos Penelopes).
 Javier Bardem es un gran artista y la transformación en Pablo está bien. El problema es el mismo que con la peli, YA LO VIMOS VARIAS VECES Y BIEN HECHO. No hay sorpresas, ni giros, no hay PROFUNDIZACIÓN, ni nada que haga que valga la pena. Nada es diferente a como se contó en el pasado y eso es imperdonable. Es como tirar guita a la basura esta producción. No parece una peli del gran director Fernando Leon de Aranoa quien en el pasado dio pelis divas como «Princesas» o «Los lunes al sol» ( si no la vieron, véanlas y perdónenle este bodrio).
 Yo te diría que veas la serie de Netflix sobre este personaje nefasto, que si bien lo quieren endiosar con sus excentricidades y sus «buenas acciones» ( sí es cierto que le dio una pizca a los pobres, pero fue mucho más lo que le quitó) porque no deja de ser un personaje apasionante, un loco que cambio la historia de nuestro país hermano latinoamericano y también del mundo. La peli no le hace honor a la historia ( no a él, él no merece que se use la palabra honor cuando se lo nombra) y lo único que logra es aburrirte si ya la conocés.
2 FACUNDITOS ( REGULAR)